Nuestra historia

El Albergue inició sus labores en una granja prestada en 1987, cuando un grupo de amigos, pertenecientes al club deportivo Los Pinos, deseosos de hacer algo por los más necesitados constituyeron la A.C; después rentaron una casa en Tlaquepaque; posteriormente, en 1996 la Institución adquirió un terreno en Cd Granja, Zapopan y se construyó la Casa Hogar. En 2003 se inició el trabajo con los Jóvenes con la finalidad de darle continuidad a la labor educativa realizada desde pequeños, a la par se instituyó el trabajo con sus familias a través del Departamento de Formación Familiar, lo que permite realizar un diagnóstico más preciso de la problemática familiar de cada caso; la Casa de Jóvenes se inauguró en 2011.

Con el apoyo de F. Quiera, recibimos la asesoría de F. Juconi para desarrollar con nuestro equipo de educadores y psicólogos el Modelo Educativo de Desarrollo Integral (MODI), el cual responde a las necesidades de la población e interviene con eficacia y profesionalismo en todos los ámbitos que rodean al niño/joven/familia. El Modelo abarca cuatro áreas de desarrollo humano: física, cognitiva, emocional y social, para lo cual se desarrollan las siguientes actividades: En el área física: alimentación sana, deportes, cuidado de la salud, medicamentos, etc. En el área cognitiva: escolarización, computación, asesoría académica, educación especial, agricultura sustentable, taller matemáticas, etc. En las áreas emocional y social: Atención psicológica: acompañamiento familiar, terapia individual, música, talleres de prevención de abuso sexual y violencia, resiliencia, etc.

En 2013 editamos el libro: “Niños y Jóvenes por un Mundo Mejor: Modelo Educativo del Albergue Infantil los Pinos, A.C.”, lo que nos permite compartir nuestras estrategias para mejorar las condiciones de vida de muchos niños y familias; así mismo fuimos calificados por Filantrofilia.

El Albergue da casa, comida, educación y una familia atendiendo anualmente de manera directa a 67 niños de 3 a 12 años, 33 jóvenes de 13 a 18 años y 57 madres; indirectamente a 209 integrantes de sus núcleos familiares, dando un total de 361 beneficiarios.

Estos premios tan importantes, son para nuestros bienhechores una garantía de que sus donativos están generando beneficios de trascendencia para los niños para toda su vida. Significa también un compromiso por mantener el alto nivel de calidad que los niños y nuestros queridos bienhechores, se merecen. Si tú eres un bienhechor del Albergue, con tus donativos haces posible la buena labor en favor de los niños.Por eso estos premios, tú los ganaste!