Voluntarios y Servicio Social
La labor de los voluntarios que donan parte de su tiempo a los niños, es invaluable. Es un acto de gran generosidad, porque en tiempo no habemos ni ricos ni pobres; todos tenemos las mismas 24 horas cada día; ni un segundo más, ni uno menos. El voluntario dona una parte de lo más valioso que tiene: su propia vida.
Ser voluntario es una gran satisfacción personal. Dar compañía, dar cariño y dar ese testimonio generosidad en favor de los que menos tienen; es la forma más humana y más sublime, de embellecer nuestra vida.
Ser voluntario implica también una gran responsabilidad. Todo adulto que participa en las actividades de la institución, es un modelo que los niños van a tender a copiar. Su buen ejemplo estimulará al niño a ser una buena persona toda su vida. La alegría del voluntario, su optimismo, su generosidad y su dedicación; le enseñarán que la vida puede ser bella, si logramos superar los eventos negativos de nuestra historia.
Si tienes interés en ser voluntario, te felicitamos y te agradecemos de parte de los niños por este gesto tan generoso. Revisa las condiciones generales que siguen a continuación y evalúa la posibilidad de unirte a esta bella obra y compartir con todos nosotros, esta grata alegría de ayudar a los que menos tienen.
Condiciones Generales del Voluntariado
- Es importante que analices y decidas en qué tipo de actividades te gustaría participar. Determina muy bien el tiempo del que dispones y en qué horarios podrías apoyar a los niños.
- Para que tu labor como voluntario sea muy positiva, es necesario que siga los lineamientos del modelo educativo que llevamos en el Albergue. Antes de iniciar su labor, los voluntarios reciben un breve Curso de Inducción, que te permitirá conocer los elementos básicos de nuestro modelo educativo.
- Todo adulto es un ejemplo y un modelo para los niños, que tienden a imitar. Es imprescindible que los niños vean siempre en nosotros, los patrones de valores y de conductas positivas, que les ayudarán a salir adelante en sus vidas.
- Toma en cuenta que los niños forman lazos afectivos con los voluntarios. Un voluntario que corta de tajo su labor, representa para el niño un nuevo abandono, una ratificación de que no es merecedor de amor, de que no vale nada, etc. Por eso es tan importante hacer siempre un “cierre” adecuado al final, así como cumplir muy bien con los horarios de los niños y los tiempos acordados.
¿Quieres ser voluntario?
Comunícate con nosotros:
Tels: 3629-5000 | 3629-5002
Encargada: Elizabeth Martínez
Email: desarrollo.humano@lospinos.org